Esta entrada se basa en el nuevo
y duodécimo álbum de estudio de la australiana y Reina del Dance, Kylie
Minogue, “Kiss Me Once”.
Resulta ser el primer trabajo de
su carrera lanzado con la discográfica Roc Nation, y su lanzamiento mundial
tuvo lugar el pasado 18 de marzo: desde entonces, ha conseguido alcanzar las
primeras posiciones en las listas de venta de algunos países de todo el mundo.
Entre otros, adapta el clásico
Dance y Pop que la artista acostumbra a introducir en sus álbumes, además de
ciertas influencias de R&B y Electrónica. Como es imaginable, su temática
gira en torno al amor y a la pasión: pero, eso sí, desde un punto de vista más
misterioso y experimental.
“Kiss Me Once” cuenta con 11 temas en total, cantidad que asciende
a 13 en su Edición Deluxe.
Como también ocurrió en “Aphrodite” (2010) con “All The Lovers”, el primer tema resulta
ser, además, la carta de presentación del mismo. Una explosiva y encantadora
pista de Dance-Pop que juguetea en un terreno Electro-Urban y que cuenta con la
aparición (especialmente al final de la pista) de toques orquestales que añaden
un toque de distinción y elegancia sumamente exquisitos.
Una vez que hemos cometido muchos
errores, llegamos a un punto en el que nuestro nivel de percepción del mundo y
de nosotros mismo cambia por completo: es un hecho que nadie estará dispuesto a
arriesgar su vida por nosotros. Tampoco lo esperábamos, ¿no? Lo único que nos
queda es la opción de correr libres, adentrándonos en lo desconocido…Al fin y
al cabo, no tenemos absolutamente nada que perder.
“Into The Blue” supone también una amplia demostración vocal por
parte de Minogue, la cual se desenvuelve con pasmosa facilidad en la producción
de esta composición. Su vídeo musical, aunque resulta ser considerablemente más
sencillo que otros cortes visuales de la carrera de la australiana, nos muestra
el disfrute con el que ella y su pareja viven una intensa y amorosa relación.
“Iré a donde nadie sabe, donde quiera que el viento sople. Aunque
esté sola…
Cuando mi espalda retroceda contra la pared, no necesitaré que nadie
me rescate. Porque no he estado esperando ningún milagro, sí, esta noche voy a
correr libre. Hacia lo desconocido, sin nada que perder…”.
10/10
Nos encontramos ante uno de los
momentos más atractivos de este nuevo trabajo, un tema que, personalmente,
considero que pide ser single a gritos: “Million
Miles”.
Apoderándose de un instrumental
brillante y absolutamente hechizante, puede presumir de tener el que es,
probablemente, uno de los estribillos más pegadizos del nuevo material que nos
ofrece Kylie. Me atrevería a afirmar que estamos ante la pista más instantánea
de “Kiss Me Once”, incluso más que el
primer corte promocional.
Cuando la pasión y el poder del
amor se apodera de nuestro ser, el simple hecho de tener en frente nuestro a
aquella persona que queremos o deseamos y el no poder tocarl@ puede asemejarse
a una auténtica tortura. ¡No hay más que vivirlo para darse cuenta!
“Quiero amar solo un poco más fuerte, mi corazón está latiendo al
ritmo de este tambor. Aún no ha comenzado, pero sé que es amor.
Porque me siento como que estoy a millones de millas lejos, cuando
tocas mi cuerpo. Me debilito y para mí es difícil llegar hasta ti”.
9/10
Coronándose como uno de los temas
más insulsos del conjunto del disco bajo mi punto de vista, “I Was Gonna Cancel” llega a nosotros
como la tercera pista de este nuevo trabajo.
A pesar de su Electrónico
instrumental que no acaba de convencerme (o, al menos, en su totalidad), el desenlace
perteneciente al estribillo no tiene absolutamente ningún desperdicio y,
probablemente, nos encontremos ante uno de los momentos más destacables del
álbum líricamente hablando.
Cuando hayamos pasado por una
mala experiencia a nivel de desamor (y esta lección es también aplicable a
cualquier momento no grato que hayamos podido experimentar), simplemente
tenemos que hacernos la idea de que no podemos dejarnos vencer. La vida es una
constante lucha y está llena de motivos por los que batallar: mirémonos en el
espejo y observemos quiénes somos: nuestras cicatrices, nuestras victorias,
nuestros errores, nuestros aciertos…Démonos cuenta de que merece la pena vivir
y que tenemos que enfrentar la realidad por nosotros mismos. ¡Vamos!
“Iba a abandonar, cuando miré al cielo. Sabía que la negatividad no
prevendría que el sol brillase. Iba a abandonar, y tomé un segundo para darme
cuenta de todas las decepciones que esto acarrearía. Iba a abandonar, y me
recordaste quién era. Todo está más claro, como que un espejo es para una mujer
lo mismo que es un perro para un hombre.
Simplemente salta de la cama, ve y afrenta el día. A quién le
importa lo que sepas, no dejes que interfiera en ti de ninguna manera. Expulsa cualquier
temor, simplemente levántate y ve. ¿Qué hay al otro lado? Nunca lo sabrás a
menos que vayas, chica”.
7,5/10
Con una producción clásica para
la cantante en la que se hacen de notar el Dance-Pop y las influencias
Electrónicas, podemos apreciar a una Kylie que ha sido invadida por la pasión
frente a un chico con el que no puede evitar imaginar una relación amorosa y, a
su vez, carnal.
No me atrapa al completo, pero si
hay algo que os puedo decir, es que su pre-estribillo es absolutamente
fantástico. El instrumental crece y la voz de la artista va cobrando firmeza y
seguridad para, posteriormente, desembocar en un estribillo que (por lo menos,
bajo mi punto de vista), no acaba de estallar como debería.
“Pasa a través de la puerta, como si supieras que eres exquisito.
Pisa mi suelo, como si supieras que eres exquisito. Estás ardiendo, pero molas:
todos los ojos están en ti.
Por lo que no me recrimines por querer, simplemente, mucho. Eres
sexy, y lo que necesitas es un amor sexy. Todo lo que veo, cada vez que te
miro, es que eres libre. Solamente quiero estar contigo, dame ese amor sexy.
Pareces muy sexy, muy sexy, en mi cabeza.
Pareces muy sexy, muy sexy, en mi cama”.
8/10
Uno de los temas cuyo título
creaban más expectativas, y uno de los previews
que más hype generaban en aquellos
que esperábamos ansiosos este álbum es la sensual “Sexercize”.
Acaparando todas (o la gran
mayoría) de las papeletas para ser lanzado como segundo single de “Kiss Me Once”, podríamos calificarla
como familiar (y no precisamente lejana) de aquella estupenda “Skirt” que, por desgracia, no acabó
entrando en el corte final del disco.
Una sesión desenfrenada de
ejercicio, de sudor, de constancia y de agotamiento; pero también de sexo, de
pasión, de sensualidad y de deseo. Minogue filtrea con un género que resulta
ser totalmente novedoso dentro de su carrera musical: el Dubstep. El acabado
resulta ser de lo más llamativo y, en su conjunto, no tiene absolutamente
ningún desperdicio.
“Déjame ver tu sexo y ejercicio, vamos, cariño, bota, bota. Sexo y
ejercicio, siente la llamarada, sexo y ejercicio. Déjame ver cómo lo bajas,
bájalo. Déjame ver cómo lo subes. Déjame ver tu bote, bote, bote, bote.
Tómalo, tómalo, sexo y ejercicio. Pon tus manos en el aire si te
sientes bien. Tómalo, tómalo, sexo y ejercicio. No lo muevas, no lo retires. Si
quieres sentarte bien, tómalo, tómalo, sexo y ejercicio. Sexo y ejercicio”.
9/10
Uno de los instrumentales que
resultan ser más sorprendentes si tomamos en cuenta todas las pistas de este
nuevo trabajo es aquel que posee “Feels
So Good”.
Un corte Dance de ligeros sonidos
selváticos (pero, eso sí, muy distante del fantástico B-Side del primer single, “Sparks”,
cuya esencia tropical es más que notoria).
Particularmente es, para mí, como
un momento ciertamente insípido pero que, a pesar de ello, no presenta ningún
inconveniente a la hora de ser escuchado. La vocalidad de la artista adopta
unos matices exquisitamente dulces y, a nivel lírico, nos encontramos con una
proposición de lo más romántica.
“Y se siente, sí, se siente muy bien. Cuando estás aquí, estamos
aquí para amarnos: no para abandonar, no. Sí, se siente tan bien cuando estás
aquí, tan cerca, estamos aquí para amarnos”.
7,5/10
Una de mis piezas preferidas de “Kiss Me Once” resulta ser uno de los
temas que, al parecer, no han acabado de agradar al público y a los fans de la
artista. Os hablo de una canción que, personalmente, deseo que vea la luz como
single: nada más y nada menos que “If
Only”.
Apoteósica y hechizante. Pistas
como esta son las que hacen que Kylie Minogue me encante de la manera en la que
lo hace. Una pareja no atraviesa precisamente uno de sus mejores momentos, y es
que hemos llegado a un punto en el que ambos desean romper una relación que
permitirá que sus corazones vuelen libremente. ¡Si sólo…! Pero, tristemente,
todo parece indicar que, a estas alturas, no hay condicionante que valga.
A pesar de ser un tema, a niveles
generales, pesimista (especialmente si nos fijamos en la temática que abarcan y
han adaptado siempre las canciones de la artista), el espíritu y la magia de la
Reina del Dance impregnan a este corte de una manera que yo solamente puedo
calificar como sublime.
“Si te liberase, y vinieses de vuelta a
mí…Si sólo…
Dos corazones quieren abandonar para estar solos. Si sólo…El
verdadero amor está esperando sobre alas. Si sólo…Dos corazones quieren
abandonar para estar solos. Si sólo…El verdadero amor está esperando sobre
alas. Si sólo…
Solo, si sólo…
Solo, si sólo…”.
10/10
Uno de los títulos (si no el más)
sugerente de todos aquellos que pudimos entrever cuando fue estrenada la lista
de temas del álbum fue y es, sin duda, “Les
Sex”.
Con una producción que bebe y
recuerda a los temas más pausados y calmados de su anterior trabajo “Aphrodite”, podría ser definida sin
inconveniente alguna como la pista más cliché de este nuevo disco: no sería
capaz de contar la cantidad de veces que es pronunciado el estribillo.
Hay parejas y parejas pero, si
hay algo que no podemos negar, es que algunas de ellas no podrían recibir un
nombre que las determinase. Es algo similar a lo que le ocurre a K con su
chico, y es que si no sabe si llamar a su relación amor o, simplemente, una
mutua búsqueda de placer. Pero, al fin y al cabo, ¿qué más da?: o, al menos,
así lo siente ella.
“Y reúnete conmigo en la oscuridad. Podríamos llamarlo amor…
Amémonos, tengamos sexo, droguémonos, toquémonos. Podríamos
definirlo como fugaz, podríamos llamarlo, podríamos llamarlo…Amémonos, tengamos
sexo, lleguemos hasta las manos, lleguemos hasta las piernas. Podríamos
llamarlo…No me importa: podemos llamarlo amor”.
7,5/10
Llegamos al que es el tema
homónimo, “Kiss Me Once”, que es
además la novena pista y, para mí, una de las más destacables de esta nueva
colección que nos ha ofrecido la artista.
Esta canción es puramente Kylie
Minogue: un estribillo totalmente encantador, un instrumental disfrutable, una
vocalidad de lo más dulce y una romántica letra. Pero eso sí, tal y como sucede
con “Everything Is Beautiful”, se
basa en un tierno romance que ha pasado por difíciles momentos y que hace
mención a los momentos difíciles de la vida. ¡Todo un acierto!
¿Por qué no podría ver este tema
la luz como single? ¡Personalmente, disfrutaría mucho! La luz que con tanta
fuerza transmite y ha transmitido la Reina del Dance a lo largo de su carrera a
través de su música es notoria, de nuevo, aquí.
“Y la noche llegará. Escucha mi consejo, levántate y afronta al
miedo. Una lágrima cae, la tensión agrieta las paredes…Y llega el alivio.
Tú y yo, cariño, pasamos por ello. Tú y yo, tenemos algo de amor que
hacer. Oh, bésame una vez, y me verás caer. Oh, bésame dos veces, y te daré
todo de mí”.
9,5/10
Os presento a la única
colaboración que ha pasado al corte final del álbum y que, sin lugar a duda, se
corona como el peor tema del mismo. Es “Beautiful”,
un tema a dueto con Enrique Iglesias también incluido en su nuevo álbum, “Sex and Love”.
Estamos ante una tierna
demostración de amor y, en sí, una confesión, ya que al parecer la pareja
formada ha atravesado una ruptura y tanto el uno como el otro declaran no
haberse olvidado.
La pista que un mayor índice de
rechazo ha generado y que ha resultado ser la gigantesca decepción de este
nuevo trabajo. ¡Y que, a pesar de ello, a mí no me horroriza a tal nivel! Esta
Balada de influencias mínimas Electrónicas une a dos de mis artistas preferidos
y afirmo que, pesar de la omnipresencia y del despampanante uso de Autotune en la voz de ambos, tiene su
encanto: o, al menos, así es bajo mi punto de vista.
“A veces, en la línea del amor, sigue doliendo. Pero dijimos para
siempre, todo dicho atravesando las tormentas. Pero estuvimos juntos y, ahora,
solamente quiero que sepas que, aún después de todo este tiempo, seguirás
siendo el único.
Tú, tú eres muy bello, tú eres mis ojos. Solamente quiero que sepas
que, aún después de todo este tiempo, seguirás siendo el único”.
6,5/10
Cerramos la Edición Estándar del
álbum con “Fine”, undécima pista que
nos muestra a la Kylie más positiva, entusiasmante y con un espíritu de lo más
vivaz que irradia felicidad se le mire por donde se le mire.
El Dance-Pop se apodera de este
corte en el que la artista garantiza a una persona en concreto, o a nosotros,
de que todo cuanto hagamos podrá y nos saldrá bien. Simplemente tenemos que
mirar hacia delante y mantener una visión optimista. ¡El resto vendrá solo!
Resulta ser un cierre que nos
deja con un buen sabor de boca pero que, raramente, carece de uno de los
momentos en los que más lucen las canciones de la australiana, y es el puente
antes del último estribillo.
“Lo tienes todo pero no te sientes lleno, incluso las cosas más
dulces son agridulces. Estás viviendo en alto y estás asustado por la caída, y
aún no te reconoces totalmente a ti mismo.
La noche, la noche, la noche está llena de lágrimas. Tú lloras,
lloras, lloras, a veces este mundo puede dejarte congelado. Pero todo será…
Bien, vas a estar bien. No tienes que preocuparte: no vuelvas y
corre, corre, corre. Dirige tu cara hacia el sol, sol, sol. Todo va a estar
bien, un día más resplandeciente vendrá, vendrá, vendrá. Dirige tu cara hacia
el sol, sol, sol”.
8,5/10
La primera pista perteneciente a
la Edición Deluxe es también pariente cercana de “Sexercize“ y de “Skirt”.
Y es que, contando con una hipnotizante producción Electrónica de ciertas
influencias Dubstep, “Mr. President”
resulta ser uno de los mejores momentos de “Kiss
Me Once”.
Todos sabemos que la artista a lo
largo de su carrera acostumbra a interpretar temas más suaves que este pero, a
pesar de ello, logra domar al más que pegadizo instrumental, que tan hardcore resulta ser si miramos hacia
atrás en su carrera musical. Los momentos que el mismo ofrece al final del tema
tampoco tienen desperdicio.
Encarna a Marilyn Monroe en una
relación de lo más romántica y pasional en la que, cual Kennedy, se refiere a
su chico como “señor presidente”. A niveles generales, una de las mayores
sorpresas del álbum y el tema de mayor toque humorístico del mismo.
“Hey, señor presidente, vaya un caballero. Es un honor conocerte.
Hey, hey, señor presidente, seré tu Marilyn y, cariño, nunca te dejaré. Estoy a
tu merced ahora, simplemente dime cómo puedo complacerte. Hey, hey, señor
presidente. Seré tu Marilyn y, cariño, nunca te dejaré. ¡Oh, señor
presidente…!”.
9,5/10
Indiscutiblemente el momento más
oscuro y que da cierre (además, con broche de oro) a esta nueva colección de
temas de la Reina del Dance resulta ser la pista número trece y el segundo Bonus Track, “Sleeping With The Enemy”.
Un Mid-Tempo de influencias Pop
que es el único momento en el que un sentimiento de negatividad se apodera del
espíritu de la artista. Y es que esta es una pista ciertamente inquietante: el
solo hecho de que esté colocada de modo que finalice el álbum es un aspecto de
lo más curioso.
Particularmente no puedo hacer
más que imaginar a Kylie durmiendo junto a su ex novio, Andrés Velencoso,
mientras este recordaba y soñaba con su actual pareja, Úrsula Corberó. Y ya no
solamente nos encontramos ante la desafortunada y triste situación de desamor
de esta artista, sino que “Sleeping With
The Enemy” es también un tema aplicable a situaciones en las que podemos
estar rodeados de alguien que no busque más que nuestro sufrimiento y nosotros
lo desconozcamos. ¡Escalofriante!
“¿Qué es lo que ella hace,
que yo no hago? ¿Es que es ella más hermosa? ¿Te hace ella sentir como en casa?
¿No fue suficiente que te ame? Le has estado dando a ella tus besos, y casi me
pone enferma que tenga que estar oyendo algo como esto.
Es como que no sé quién eres, siento como una daga en mi corazón. De
repente, ahora parece que estoy durmiendo con el enemigo. No puedo parar de
repetir las palabras que dijiste, eres como un extraño en la cama. De repente,
ahora parece que estoy durmiendo con el
enemigo”.
9/10
Los años pasan
y, en el mundo de la música, son el máximo desafío al que se enfrentan los
artistas o grupos. A sobrevivir al paso del tiempo, a seguir ofreciendo
productos de calidad, a ser fieles a su estilo o re-inventarse…Una de las pocas personas
que pueden presumir de haber atravesado todos estos obstáculos es, sin lugar a
duda, Kylie Minogue.
Una artista
hechizante que nos ofrece este 2014 su nuevo material, formado por un total de
13 canciones. Tras el excelente sabor de boca que nos proporcionó “Aphrodite”, su undécimo álbum de
estudio lanzado, esperábamos un trabajo que estuviese a la altura de
expectativas. Y ya no solamente por dicho CD, sino también por los dos temas
lanzados previos a este disco: tanto “Timebomb”
como “Skirt”. El primero mencionado
era de esperar que no pasase al corte final al ser una especie de tema de conmemoración por sus 25 años de carrera; pero considero que era más que de esperar
que el último nombrado si consiguiese formar parte de “Kiss Me Once” y, también, que fuese una pista que marcase un giro permanente en cuanto a esta era.
Si nos referimos a "Skirt", podemos intuir un intento de realizar un proyecto tomando este nuevo estilo de base si prestamos atención tanto a “Sexercize” como al Bonus Track “Mr. President”: y es que, sin lugar a duda, ambos son (si no las mayores) dos de las más estupendas sorpresas que nos ofrece la artista. Sin embargo, la propia artista confirmó hace algunos meses que el resto
de su nuevo trabajo no sería así. Llega el primer single, “Into The Blue”, y nos ofrece una estupenda demostración del
poderío que por todos es sabido que la artista ejerce sobre el Dance-Pop y que, a primeras, no logró fascinarme como lo hace ahora.
Desaparecen de
nuestras ideas las posibilidades de una colección de temas Pop con fuertes
influencias de Electrónica, Dubstep y toques de Electro-Urban y nos trasladamos
a lo que es, en sí, “Kiss Me Once”:
un conjunto decente de reminiscencias a distintos momentos de la carrera y discografía de la
Reina del Dance. Especialmente, retazos de aquel “Body
Language”, lanzado en el 2006. ¿Significa esto que nos encontremos ante un
trabajo que no se encuentra a la altura de lo esperado tras casi 30 años de
carrera por parte de Kylie Minogue?
Por un lado,
rotundamente no; pero, por otro, quizás sí. Un aspecto de lo más llamativo es
que precisamente tanto las pistas contenidas en la Edición Deluxe como el
B-Side “Sparks” logran opacar a parte
de los temas pertenecientes a la Edición Estándar del álbum. Para mi gusto,
existen pistas como “Feels So Good”, “Les Sex” o “Beautiful” que, a pesar de no ser musicalmente desagradables, sí que
podrían ser definidas como cortes algo prescindibles.
Obviando, por
supuesto, excelentes piezas como lo son “Million
Miles”, “Sexercize”, el primer
single “Into The Blue”, “Fine” o el Bonus Track “Mr. President”. Destacando,
especialmente, a la homónima y dulce “Kiss
Me Once” y a la hechizante “If Only”,
para mi gusto la joya de este nuevo material discográfico. Porque si hay algo
que no podemos negar, es que “Kiss Me
Once” está impregnado (y no es poco decir) de la magia que desprende Kylie Minogue.
80/100
